Luz

Resisto ver los espectros que circulan a mí alrededor. Intentan involucrar mi alma en aquel ambiente nefasto del putrefacto óbito, donde todo es deserción y miseria; donde la luna no ilumina la noche como solía iluminarme y acunarme en esos días de resfríos y vagas ausencias del amor imperfecto; donde el sol no brilla como en mi incesante mundo de sueños eternos; y la brisa, tan cálida, que solía acariciarme los cabellos debajo de un árbol de facultad… Allí, allí la brisa es un torbellino opulento de hierba seca y tierra infértil que me deja sin respiro, sin esperanzas y sin destino.   Resisto ver aquel álgido mártir que se muestra benevolente ante este caótico mundo, resignado al destierro, al desconsuelo, a la hambruna y al naufragio que tanto temo. Resisto ver al descreído, al agnóstico descarado que pide ayuda a gritos, a un Dios que no ve, si está afligido…   Me resisto a no resistir…

De lo que peor que me ha pasado Hice canción, por que yo canto lo que siento Violentamente al otro lado, se fue mi amor Sin un adiós, sin un hasta luego. No estuve yo para evitarlo, tal vez Lo inevitable no responde al vade retro. Suele la gente equivocarse aquí. Y las personas ver verdad en lo no cierto. Una gran razón me asiste en este viaje. Dos flores de tu amor. Razón, causa y efecto. La chismosa bruja y la amistad infiel, No guarda tus flores. Por que yo, yo las guardo bien. La primera esta polemizando Y el pequeño capullo Se esta abriendo a cielo abierto. Y no he de negarlo, he conseguido un nuevo amor. Pues sigo en la vida Recordando de vos, lo mejor. Es el amor el responsable Unica guía del espíritu imperfecto Es el amor el responsable, creo yo Es la verdad, es el sentido, el padre nuestro.